La revisión sensorial de una motocicleta es una parte importante del proceso de revisión técnico-mecánica (RTM). Durante esta revisión, se evalúan varios aspectos del vehículo mediante la percepción sensorial y el uso de instrumentos específicos, sin necesidad de desarmar partes del vehículo. Aquí hay algunos puntos clave:
Revisión del motor: Se busca detectar pérdidas de aceite, fugas en el sistema de refrigeración y niveles de líquidos.
Revisión de la estructura: Se inspecciona la estructura del chasis y la carrocería para detectar problemas como desprendimientos, aristas vivas o bordes cortantes.
Revisión del interior: Se evalúan aspectos de seguridad como asientos mal anclados, elementos deteriorados o sueltos, y aristas que puedan causar daño a los ocupantes.
Revisión de componentes eléctricos: Se verifica el estado de los componentes eléctricos y la batería.
Estas inspecciones ayudan a identificar problemas potenciales que podrían poner en riesgo la seguridad del vehículo y sus ocupantes.